La Organización Colegial de Enfermería realiza un decálogo con consejos para que las enfermeras puedan cuidar su salud mental ante la pandemia
Los casos de contagiados y fallecidos por COVID-19 crecen a pasos agigantados. Y la situación que atraviesa nuestro país, y más concretamente la sanidad, supone una sobrecarga física y emocional para los trabajadores sanitarios, entre los que se encuentran las enfermeras.
Los casos de contagiados y fallecidos por COVID-19 crecen a pasos agigantados. Y la situación que atraviesa nuestro país, y más concretamente la sanidad, supone una sobrecarga física y emocional para los trabajadores sanitarios, entre los que se encuentran las enfermeras.Esta situación de emergencia, mantenida en el tiempo, puede acabar suponiendo un impacto psicológico mayor que el enfrentarse a una catástrofe puntual.
La Organización Colegial de Enfermería, en colaboración con la Asociación Española de Enfermería de Salud Mental (AEESME) y la psicóloga forense, Ana Gutiérrez Salegui, ha realizado una infografía y un vídeo con 10 pautas para evitar que esta situación, mantenida en el tiempo, pueda acabar suponiendo un impacto psicológico muy grande en las enfermeras que se enfrentan cada día al COVID-19. Las recomendaciones son:
1. Dedicar tiempo con compañeros a desahogarte para verbalizar pensamientos o situaciones vividas.
2. Evitar críticas destructivas que afecten a todo el mundo.
3. Buscar apoyo familiar y social evitando el aislamiento, aunque sea a través de medios digitales y teléfono.
4. Intentar descansar cada 2h haciendo respiraciones profundas durante unos minutos que ayuden a la relajación.
5. Repartir otras responsabilidades en casa o a nivel familiar.
6. Llorar y desahogarse es normal, no lo reprimas.
7. Mantener correcta alimentación, buena higiene de sueño y practicar ejercicios de relajación.
8. Al salir del trabajo evitar el exceso de información sobre la pandemia (TV, radio, internet, whatsapp…)
9. Protegerse del desarrollo de problemas psicológicos.
10. Recordar que esto va a pasar. Evitar pensar cuánto queda para que esto pase.